La tercera exposición que hemos visto es la de Bill Viola llamada Espejos de lo Invisible.
Bill Viola nacido en Nueva York en 1951 es un videoartista contemporáneo. Está considerado como una de las figuras más influyentes en la generación de artistas que utilizan los nuevos medios electrónicos audiovisuales. Sus obras engloban videoinstalaciones, ambientes auditivos y performance y las temáticas giran alrededor de las experiencias y preocupaciones de la condición humana, tales como el nacimiento, la muerte y la consciencia.
Esta exposición nos ofrece un amplio recorrido por la trayectoria del artista, que ha evolucionado junto al desarrollo de la tecnología, también en esta exposición se reflexiona sobre la condición humana y el paso del tiempo.
La obra de Viola se caracteriza por estar llena de símbolos y referencias que se repiten de forma continuada y que él usa para expresar conceptos universales como la muerte, la vida, la espiritualidad, el paso del tiempo, el espacio o la soledad recorren su obra y van evolucionando con ella.
En sus primeras obras, Viola deja constancia de su interés por la noción del tiempo, ejemplo de ello son ‘The Reflecting Pool’ (1977-79), donde experimenta con la desintegración de la figura lanzándose en una piscina en un bosque y donde “el tiempo se extiende y queda suspendido por una serie de acciones que se ven solo en el reflejo del agua”
Comentarios
Publicar un comentario